viernes, 11 de abril de 2014

11/04: Black Butler Vol. 4



11/04: Black Butler – Vol. 4 (194 Págs.)
Yana Toboso – Norma Editorial 2012


Este cuarto tomo deja un gusto agridulce. Empieza con esa atmósfera de misterio oscuro de la época victoriana, con extraños y grotescos crímenes que la Organización Phantomville tiene que descubrir, con el niño protagonista Ciel Phantomville y su mayordomo demonio Sebastian a la cabeza. Pero el final no me dejará  satisfecho, por la resolución de lo que parece ser una saga anticlimática para la expectativa que se había creado. Aún tengo el quinto tomo para que me sorprenda con alguna vuelta de tuerca.
 Al idioma español es publicado por la Editorial Norma, con sus clásicos ediciones manga son sobrecubiertas y avances del próximo tomo recopilatorio. Y además, este tomo recopila los capítulos 15 al 19, y cuenta con la traducción de Marta Gallego, de Traducciones Imposibles.

  El argumento nos situará en Londres, con la investigación de la Organización Phantomville sobre unos crímenes inusuales: aparecieron colgados unos anglo-indios (ingleses que en su paso por India, en esa época aún colonia del Imperio, hicieron fortuna y luego regresaron como “pseudo nobles”). Mientras investigan por el barrio del East End, en donde viven la mayoría de los indios en Londres, se suman dos personajes: la princesa de Bengala, Soma Asman Kadar y su mayordomo misterioso, Agni. Su visita a Londres se debe para buscar a una sirviente secuestrada, Meena. Sin embargo, Ciel y su mayordomo descubrirá que el mayordomo Agni trabaja en secreto, por motivos que aún no se dan a conocer, para West-Jebb, un acaudalado comerciante que importa productor de la India. Él será el culpable de colgar a los anglo-indios, y el motivo es para quitarse la competencia de una competencia de preparado de curry (una comida hindú) donde asistirá la Reina, ya que esa competencia le puede permitir ganar el Royal Warrant, un reconocimiento especial de la corona a establecimientos o empresas cuyos productos deleiten a la familia real. Con este reconocimiento, sus ventas se triplicarían, por lo que los crímenes no son xenófobos, si no causados por el vil metal.
 Como siempre, la mangaka Yana Toboso nos representará muy bien la Inglaterra victoriana, con detallados paisajes del Londres de la época y las vestimentas dibujadas con gran cuidado. No tenemos muchas escenas sangrientas que tanto la caracterizan (sólo un flashback de Ciel cuando pierde a sus padres y es tomado como esclavo, momento en el cual invoca al demonio Sebastian), pero tenemos una batalla de esgrima entre los mayordomos muy bien representada. Pero además, en esta ocasión nos presentará el drama hindú de dividir su sociedad en castas, ser una colonia inglesa, y ser discriminados por eso, algo que puede apreciar cualquier lector de Sherlock Holmes (hasta aparece los clásico detectives de Scotland Yard). Aparte de meterse  con temas profundos, tenemos el clásico humor de la mangaka desparramado a lo largo de los cinco capítulos, a cargo de estos nuevos personajes, para darles un punch inicial.
 ¿Por qué me quejo del final? Este tomo es el principio de lo que se conoce como Saga de Competencia del Curry, y el último capítulo del tomo nos presentarán los planes de West-Jebb de quedarse con el Royal Warrant por una competencia de preparar curry, con ayuda de Agni, y Ciel decide intervenir y meter a su mayordomo infernal a competir en el preparado de la comida hindú. De esta manera, los crímenes y misterios se resolverán con una competencia de cocina, que seguramente la autora introducirá humor o alguna vuelta de tuerca para que esta saga no se estanque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario