29/10: Detective Conan Vol. 1 - Tomo 7

29/10: Detective Conan – Vol. 1 - Tomo 7 (180 Págs.)

Gosho Aoyama – Planeta DeAgostini 2004

Como comenté ya en todas las reseñas de esta serie, Planeta DeAgostini publicó en España a lo largo de 1998, los primeros trece tomos de Detective Conan. Pero por bajas ventas, la serie fue cancelada. Afortunadamente, años después, estos trece tomos fueron reeditados bajo el nombre de Volumen 1, y los tomos siguientes como Volumen 2. Y para animarme a leer los tomos que me faltan de esta primera parte titulada Volumen 1, me prometo finalizar los primeros 13 tomos antes de fin de año. El autor de esta exitosa y adictiva serie es Gosho Aoyama, mangaka japonés conocido por su estilo de dibujo con ojos y orejas muy redondos. Pero ese estilo infantil de dibujo no lo privará de dibujar escenas de asesinatos con chorros de sangre.

 En el primer capítulo del tomo (que recopila los capítulos 61 al 70), finalizará el caso que empezó en el tomo anterior, titulado como El Truco de la Fotografía. Refrescando la memoria, en este caso ya habíamos visto al asesino aniquilar a su víctima, pero su coartada perfecta con fotos tomadas durante un festival lo hacían inocente, y no contaré cómo se desentraña la coartada perfecta para no spoilear.

 El siguiente crimen, El Caso de La Sonata Luz de Luna, será el más complejo y entretenido del tomo (tanto que ocupa 6 capítulos y un capítulo especial de una hora en el anime). Kogoro Mouri ha recibido una extraña carta por un cliente llamado Keiji Asou pidiéndole investigar algo en la isla de Tsukikage, y como siempre se fue acompañado de Ran Mouri y Conan Edogawa. Luego se enteró de que el hombre que solicitaba la investigación, ha estado muerto desde hace 12 años. Él era un pianista de fama mundial que de repente mató a su familia, puso su casa en llamas, y tocó la Sonata Claro de Luna de Beethoven mientras la casa ardía a su alrededor. Con este hecho ocurrido en la isla, se relacionaran tres asesinatos de personas destacadas del lugar, y si además sumamos otros delitos que se entremezclan con la investigación confundiendo al lector y un asesino inesperado, tenemos como bien dije antes, el caso más interesante del tomo (y de los más interesantes también hasta el momento).

Y el último caso de este séptimo tomo, con 3 capítulos y el final por ver en el próximo tomo, empieza cuando una joven llega a la oficina de Kogoro para pedirle que encuentre a su novio desaparecido: Shinichi Kudo (la identidad adulta de Conan). Sin embargo, Conan no reconoce a esta joven, aunque ella insiste. Pronto se descubrirá este misterio está enlazado con el secuestro del hermano pequeño de un futbolista, y tendremos la oportunidad de ver uno de los inventos del Profesor Agasa, un fax dentro de una lunchera.

 Gran tomo gran, que me hace enviciarme más con la serie y esperar cumplir mi promesa de leerme los 6 tomos que me faltan del Volumen 1 antes de fin de año.