02/02: La Princesa
Caballero – Vol. 1 (236 Págs.)
Osamu Tezuka – Glenat
Ediciones 2004
Recordando que Febrero es el “mes del amor”, me centraré en reseñar
cómics en los cuales el amor gire como trama central, aunque como siempre,
habrá espacio para leer de todo un poco. Si hace veinte años me
hubieran dicho que iba a terminar escribiendo una reseña sobre una de las
series de dibujitos más noña de su época, me habría reído en la cara de quien
afirmara aquello. Amante de todo lo que signifique animación, incluso en
aquellos años tenía mis límites y la serie sobre una princesa con dos corazones
me superaba con mucho (y se lo dice alguien que vio Candy, Candy o Heidi en la
infancia). El caso es que descubriendo las obras del Manga no Kamisama Osamu
Tezuka, me sorprendió descubrir que las aventuras de Zafiro y Tink (así se
llaman los personajes originales) eran creación suya.
El caso es que unos meses después, y
aprovechando el mes de Febrero que me autoimpuse hacer hincapié en mis lecturas
sobre cómics románticos, decidí le daría un vistazo a La Princesa Caballero. Y
lo cierto es que, sin esperar demasiado (casi nada, me aventuraría a decir) la
lectura me ha sorprendido gratamente. A ver, que nadie se lleve a engaño. En
esencia, La Princesa Caballero no es más adulta que las primeras obras de
Tezuka que ya he reseñado, antes de que entre en su etapa de gekiga que tan
alabada es. De hecho, el ser el primer Shojo Manga (manga para chicas) lo aleja
del gusto por la ciencia ficción demostrado por Metrópolis o Next World.
¿Por
qué me ha gustado? A decir verdad, no lo sé con certeza. Quizás sea porque, de
todo lo que hemos comentado hasta ahora, La Princesa Caballero sea la que más
deje notar las sempiternas influencias “disneyanas” (sobre todo de Blancanieves
y Cenicienta). Pero quizás también porque subyacen otras influencias más
sutiles como la obra de Shakespeare, la versión de los hermanos Grimm del
cuento popular La Bella Durmiente, el ballet del Lago de los Cisnes del gran
Tchaikovsky, o el espíritu de los relatos de caballería o piratería tan comunes
en la literatura de aventuras. Aunque parezca imposible, Tezuka incluye dosis
de todas ellas en el relato de las aventuras y desventuras (más estas últimas)
de Zafiro mientras intenta encontrar su gran amor y definirse por uno de los
dos sexos que habitan en ella.
Si argumentalmente esta es la obra más Disney de Tezuka hasta la fecha, la parte gráfica no se queda atrás, por más que Tezuka innove sobre el tejido del manga con la introducción de los fondos floridos o los enormes ojos de los protagonistas (algo que terminará siendo marca de registro de los shojo): desde el diseño de Tink, sacado directamente de los querubines de la Pastoral de Fantasía, hasta el de la bruja Hell, la notable influencia de los estudios de animación se vislumbra más que nunca.
Una obra accesible de 3 tomos, que se puede recomendar a cualquier niño o niña para que se empiece a interesar en el cómic, ya que como uno de las primeras lecturas, con tanta aventura y chistes, es una obra ideal.
Si argumentalmente esta es la obra más Disney de Tezuka hasta la fecha, la parte gráfica no se queda atrás, por más que Tezuka innove sobre el tejido del manga con la introducción de los fondos floridos o los enormes ojos de los protagonistas (algo que terminará siendo marca de registro de los shojo): desde el diseño de Tink, sacado directamente de los querubines de la Pastoral de Fantasía, hasta el de la bruja Hell, la notable influencia de los estudios de animación se vislumbra más que nunca.
Una obra accesible de 3 tomos, que se puede recomendar a cualquier niño o niña para que se empiece a interesar en el cómic, ya que como uno de las primeras lecturas, con tanta aventura y chistes, es una obra ideal.
Me sigo sorprendiendo con el Dios del Manga,
que en cada género fue pionero y aún así, demostró cosas que pocos autores
posteriores pudieron igualar, que es su narrativa y ruptura para que ningún
género sea muy sosa y cliché, si no todo lo contrario. Sigo alabando al Dios
del Manga Tezuka.
No hay comentarios:
Publicar un comentario